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La Senda das Cerdeiras de Pontedeume, 11 kilómetros por valles verdes, molinos, fuentes y «lavadoiros» con vistas al Eume

María Salgado
MARÍA SALGADO LA VOZ

VEN A GALICIA

En los años 40 se enviaban 4.000 kilos diarios de cerezas desde Campolongo a los cuarteles militares de Ferrol. Conocer el patrimonio natural y etnográfico, y disfrutar de los cerezos en flor son las excusas perfectas para caminar tres horas entre sombras y claros

24 abr 2023 . Actualizado a las 15:24 h.

Hubo un tiempo en que el valle del Eume vivía de los cerezos y hoy en día ya celebra su propio «hanami», que es como los japoneses llaman a la contemplación de estos frutales en flor. Disfrutar de este espectáculo natural es el motivo que ha quitado alguna hora de sueño este domingo de primavera a las setenta personas, la más veterana de 87 años, que pasadas las nueve de la mañana empiezan a reunirse delante del Torreón de los Andrade de Pontedeume. Allí se ubica la Oficina municipal de Turismo, que ha organizado, por primera vez, la Senda das Cerdeiras, una ruta de 11 kilómetros y dificultad media que puede terminarse en unas tres horas. La cita es prometedora: frutales floridos, molinos de agua, fuentes, regatos, lavadoiros, hórreos y valles verdes con vistas al río Eume.

La costumbre de plantar cerezos en esta zona data del siglo X, cuando los monjes del monasterio de Caaveiro empezaron a plantar frutales en las laderas. Una práctica que se fue extendiendo por los valles del Eume, pero que no alcanzó su auge hasta los años 40 del siglo XX. Entonces, «salían todos los días unos 4.000 kilos de cerezas en camionetas desde Campolongo hasta los cuarteles militares de Ferrol», explica Silvia Sanmartín, técnica de Turismo del Concello de Pontedeume, quien tuvo la idea de crear esta ruta recién estrenada. Cuando había excedente y se sobrepasaban esas cuatro toneladas de cerezas se guardaban y se enviaban al día siguiente, según los datos recogidos por José María Varela Feal, un vecino ya fallecido que se dedicó primero al sector ganadero y fue presidente honorífico de la Uteco, agrupamiento de pequeñas granjas de leche, y después, a criar visones y plantar manzanos y cerezos.

«En los años 50 y 60 aparecieron los astilleros y como era mucho más rentable trabajar en Astano y en Bazán que plantar cerezos, empezó su decadencia», asegura Sanmartín. En los años 80, a través de la cooperativa San José, que era agraria y ganadera, se empezó a recuperar la plantación de cerezos con dos especies que se daban muy bien en la zona: el Lapin, que proviene de Canadá, y el Burlat, que es francés y da unas cerezas granates y enormes. Una actividad que volvió a decaer hasta la actualidad. «Hoy existe una asociación de árboles autóctonos que se está dedicando a la recuperación de especies locales de cerezos, como las de rabocorto, corazón y la negra de Doroña, que son las que vamos a ver en esta ruta», señala la técnica de turismo.

Huertas en la Senda das Cerdeiras
Huertas en la Senda das Cerdeiras M.S.

Un sol radiante y termómetros en ascenso que se prevé que superen los 24 grados han animado a muchos vecinos a participar en esta ruta que redescubre el patrimonio natural y también el etnográfico. Hórreos, fuentes, lavadoiros y molinos son de obligada parada en este senda que discurre por aldeas, huertas y algún tramo de bosque. «Pontedeume llegó a tener 40 molinos hidráulicos, salvo uno que estaba en la rúa Tafona, que se llamaba muíño de sangue, porque lo movía un caballo, un burro o un ser humano, y que dio nombre a esta calle», indica Sanmartín, antes de partir.

La ruta, cuyo recorrido diseñó José Permuy, de la Asociación Galega de Froita Autóctona, empieza en el Parque Fluvial Rosalía de Castro, en el inicio del paseo marítimo de Pontedeume. Las vistas del puente, la ría, los sauces llorones, y los ánades y gaviotas posándose sobre las barcas varadas bajo el sol matutino animan la marcha. Al término del paseo, se llega a San Cosme, una parroquia de Nogueirosa, y se empieza a subir hacia la aldea de Cabría, pasando por la Cruz do Cabildo. Allí se hace una primera parada para ver un regato, una fuente del año 1927 y un lavadoiro. «En algún  momento existió aquí un monasterio, en Nogueirosa. Doña Urraca y su hija dejaron escrito en un documento que deseaban retirarse de mayores a este monasterio y morir tranquilas en él, aunque se desconoce su emplazamiento», señala la guía.

El sol empieza a calentar con fuerza y la ruta asciende hasta la aldea de Cabría, que es el punto más alto del recorrido. Pasando por O Castro y la zona de la Unitaria de Ombre, se arriba  a la fuente de A Bufarda. Pese a las últimas lluvias, todavía se puede disfrutar de los manzanos y cerezos en flor que adornan las huertas, el fondo del valle y el borde los caminos. El trayecto está todo asfaltado, aunque sin pintar, y solo aparece un coche, que detiene la marcha. 

Valle de cerezos floridos y vistas al río Eume
Valle de cerezos floridos y vistas al río Eume M.S.

Se avanza hacia la zona de Pénjamo, conocida por este nombre popular que hace referencia a un bar situado allí, y se continúa hacia Chao de Ombre. Limoneros, naranjos, azaleas, camelias y glicinas dan color a las huertas y prados, en los que apenas se cría ganado. Un caballo negro cerca del camino observa el reguero de senderistas con bastones y gafas de sol. La ruta se acerca, por fin, a la verde ribera del río Eume, pasando por el lugar de A Pía, donde hay una granja de caracoles, y una ligera pendiente asciende hacia el monte Freixeiro. En el cruce, aguarda una patrulla de la Policía Local, que hace de escolta a los caminantes unos centenares de metros, durante el único tramo con algo tráfico, aunque muy escaso. Se regresa hacia San Cosme, donde aparece un pelotón de ciclistas, ya por senda peatonal, hasta desembocar, de nuevo, en el paseo marítimo, lleno a estas horas de vecinos que han salido a tomar el vermú. Un viaje inesperado al valle del Eume y de los cerezos en flor. 

  • COORDENADAS DEL INICIO DE LA RUTA: 43.4063352500372, -8.16403467465305
  • RECORRIDO: 11 KILÓMETROS
  • DIFICULTAD: MEDIA
  • DURACIÓN: 3 HORAS
  • ÉPOCA: ABRIL

Mapa de la ruta de la Senda das Cerdeiras de Pontedeume
Mapa de la ruta de la Senda das Cerdeiras de Pontedeume