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La Feira Medieval de Noia potenciará el pasado de la villa con espectáculos propios

Ana Gerpe Varela
A. gerpe RIBEIRA / LA VOZ

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El éxito del desfile de antorchas lleva a la organización a profundizar en esta línea en futuras ediciones, así como a seguir dando protagonismo a los artesanos

18 jul 2022 . Actualizado a las 05:00 h.

La villa de Noia echó el cierre ayer a una Feira Medieval que, aseguró el concejal de Cultura, Turismo e Festexos, José Pérez, «ha superado todas las expectativas». Recalcó que no solo hubo una elevada asistencia, sino también un alto consumo en establecimientos de la localidad: «Es imposible determinar la repercusión económica».

Subrayó el edil que se trata de una celebración de carácter familiar en la que cada uno puede encontrar su espacio. En este sentido, destacó el éxito del desfile de antorchas realizado el sábado, que estuvo precedido por una explicación histórica de la tradición jacobea a través del Portus Apostoli. Precisamente, esta es una de las líneas en las que José Pérez quiere profundizar en próximas ediciones: «Debemos apostar por espectáculos propios en los que se dé a conocer la historia». Incluso, se refirió a las explicaciones sobre el pasado de Noia en el taller infantil de elaboración de trajes y espadas.

Otro apartado a impulsar es el de los artesanos. Este año han sido 25 y la intención es que la cifra pueda continuar aumentando para mantener la potenciación de los gremios. En esta oportunidad había quienes moldeaban hierro o soplaban vidrio.

Otras apuestas

No son estas las únicas apuestas en las que ya está pensando el edil, quien destacó el acierto de haber incluido la calle Ferrador en el núcleo de la feria. También de cara al futuro se trabajará en esta dirección, posiblemente incrementando el número de puestos que puedan instalarse.

Asimismo, puso de relieve el esfuerzo en materia de seguridad y en la dotación de equipos de atención ante cualquier incidencia que pudiera registrarse.

La vigesimotercera Feira Medieval de Noia ha sido la más ambiciosa, con un total de 170 puestos que motivaron la ocupación de la calle de O Ferrador. Ha respondido a las expectativas creadas, superando incluso las previsiones de afluencia inicialmente realizadas por la organización. José Pérez asegura que a ello también a contribuido que, tras dos años de pandemia y restricciones, la gente tiene ganas de volver a disfrutar de citas estivales como la noiesa.