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La corza que aún recorre Os Ancares

María Guntín
maria guntín LA VOZ

VEN A GALICIA

ALBERTO LÓPEZ

Leyendas y mitos se ciñen sobre la montaña de Lugo y resisten al paso de los años gracias a la tradición oral. Una de ellas habla de Aldara, la princesa que desapareció del Castillo de Doiras y se convirtió en ciervo

16 jul 2022 . Actualizado a las 05:00 h.

Leyendas, mitos y supersticiones se entremezclan desde tiempos ancestrales en los bosques de las montañas de Os Ancares. Algunas han sobrevivido generación tras generación, y son los más mayores los que se han encargado de mantenerlas vivas, contándolas una y otra vez, año tras año. Así han conseguido vencer al olvido.

Y cuenta una de estas leyendas que un ciervo recorría incansable la sierra de Os Ancares. Sin embargo, era en realidad una princesa que se había transformado en animal. La Corza Blanca, de nombre Aldara, es la protagonista de este cuento mágico que narra cómo un día la princesa desapareció del Castillo de Doiras (Vilarello, Cervantes), en pleno corazón de Os Ancares. Estaba a punto de casarse, pero se fue de repente, y toda la comarca enterró en vida a Aldara, ya que su cuerpo nunca apareció.

Pasaron muchos años hasta que su hermano dio caza a una imponente cierva blanca. Le cortó una pata como trofeo, la guardó, y regresó a casa. Al llegar, se había convertido en una mano blanca y fina, que además portaba el anillo de Aldara. Tanto su hermano como sus padres regresaron consternados al lugar de la cacería, y allí encontraron el cuerpo de la joven, atravesado por una flecha y sin una mano.

Naturaleza mística

Al amparo de los valles de Os Ancares y de la leyenda de la cierva resiste aún el Castillo de Doiras. De su historia podemos entender cómo la naturaleza virgen de los montes desprende narraciones evocadoras, ya que los espacios naturales de esta zona son cobijo de especies protegidas que campan a sus anchas y cargan con siglos de leyendas que aún llegan hasta nuestros días, con múltiples versiones.

Pero son muchos los cuentos que asolan los bosques de Lugo. Uno de los más dulces cuenta que en la Campa de Barreiro, en Cervantes, está la fuente de los enamorados. Los visitantes deben beber tres veces para encontrar al amor correspondido.

DIPUTACION

El pacto con el diablo

También en Pontes de Gatín, Becerreá, se esconde otra leyenda. Dicen las malas lenguas que el puente nació de una promesa con el diablo, que sabía las penurias que pasaban los vecinos para cruzar el río Navia y por ello se ofreció a construirlo. Como ofrenda, le agasajaron con una cría de gato —gatín, como se dice en esta zona, y de ahí el nombre del lugar—. Pensaban que así podrían evitar el cruel pago que había exigido el demonio, que pedía una vida humana a cambio del trabajo.

Esta no es la única versión de esta historia. Otras cuentan que un joven que vivía en la margen izquierda del río se enamoró de una mujer que vivía en la derecha, y por ello decidió firmar el pacto con el diablo, que estaba disfrazado de gato y que, a cambio, pedía llevarse al primer bebé que naciese fruto del amor de la joven pareja, cuando esta contrajese matrimonio. Cuando la enamorada se quedó embarazada, fue el joven el que llevó otro gato al puente, consiguiendo así burlar el fatal destino de su hijo y engañar, por tanto, al mismísimo diablo.