«Hay orquestas que tienen 200 fechas este año y ya estamos contratando mucho para 2023, también en Ferrolterra»

Si nada lo impide (la duda es una de las secuelas de la pandemia), la «auténtica locura» que se vivió la noche del 30 de abril en O Alto, en Narón, se repetirá cada fin de semana de aquí al otoño. Tras dos años de abstinencia obligada, parece que nadie quiere perderse más fiestas, y las comisiones y los concellos (que apoyan u organizan) están dispuestos a darlo todo para no defraudar. «Este año, al ser las primeras después de la pandemia, las vamos a hacer y financiar desde el Concello: el Carmen, que va a ser una réplica del 2019, y A Fraga, con alguna novedad», según avanza el concejal de Cultura de As Pontes, Vicente Roca.

Sin desvelar qué grupos actuarán, el edil pontés sí adelanta que el cartel incluirá propuestas musicales para el público que busca una alternativa a las orquestas, que seguirán siendo el eje de la multitudinaria romería. El Ayuntamiento de As Somozas ya tiene listo el cartel de las patronales, en honor a Santiago Apóstol. El 23 habrá verbena con Olympus y Panamá; el 24, sesión vermú con Ritmo Xoven y velada con París de Noia y Panorama; y el 25, sesión vermú y verbena con Trébol. «Imos na liña de antes da pandemia. Sempre hai moita xente, o último ano xuntáronse 400 tendas de acampada pola zona que hai por riba do río. Xa falei coa Garda Civil para ver como ordenamos isto porque vir van vir [...], os rapaces que tiñan 15 anos e case non saíran, hoxe andan cerca dos 18 e van vir con moitas gañas», sostiene el alcalde, Juan Alonso Tembrás.

Detrás de nombres como París de Noia, Olympus o Trébol está el pontés Luis Soto Ferreira, responsable de Espectáculos Soto y socio de Galias Eventos, que representa a unas 70 orquestas. «Hace dos meses pensaba que esto iba a ser difícil, pendiente del protocolo de la Xunta... y cuando el conselleiro de Cultura nos dijo en una reunión, antes de Semana Santa, que se levantaban las restricciones, no me lo creí —confiesa este empresario del sector—. Y sí, ese fin de semana se eliminaron y volvimos a las condiciones de 2019».

De la experiencia de estas primeras semanas de «normalidad recuperada», Soto concluye que «las comisiones van a poder contar con más ingresos que antes porque los toldos venden más que nunca». «Lo vimos en O Alto y ahora vienen As Pontes, Mugardos, As Somozas, Ortigueira, A Capela, Cedeira... apenas están quedando fiestas por hacer en la zona de Ferrolterra, salvo algunas pequeñitas que a lo mejor aún salen», indica. Asegura que orquestas como la París de Noia «tienen 200 fechas para este año, hasta el 31 de diciembre». «Y ya estamos contratando muchísimo para 2023, en Galicia [también en Ferrolterra] y fuera [el 50 % de nuestro trabajo es en Asturias y León]», añade.

Tras dos años sin apenas ingresos —«y con inversiones ya hechas para afrontar la temporada de 2020, y créditos pedidos para pagarlas»—, las orquestas regresan a los escenarios, eso sí, con más costes. «Los gastos han subido muchísimo, en combustible, alojamiento, comidas... una orquesta de gama media para arriba ya tiene dos camiones en la carretera, la París va con cuatro...», detalla. La inflación obligará a subir los precios. «Es inevitable. En todo caso, nos adaptamos, tenemos grupos para cualquier fiesta de cualquier pueblo o aldea, desde los 2.500 euros... Por arriba, en determinadas fechas, como el 25 de julio o el 15 de agosto, las grandes pueden llegar a cobrar 20.000 euros», señala Soto.

Apoyo económico

El presupuesto de las fiestas de Santa Marta de Ortigueira ronda los 60.000 euros. «Serán del 27 al 31 de julio: el 27 en A Penela, el 28, 29 y 30 en la Alameda, y el 31 en el Cantón», anticipa Fátima Pena, agente de espectáculos y una de las integrantes de la comisión de la Patrona. «Antes de fin de año teníamos previsto organizar una cena-baile y otros eventos para recaudar fondos, y tuvimos que suspenderlos por la variante ómicron», repasa.

Los organizadores ya han hablado con el Ayuntamiento para pedirle «más ayuda de la habitual». «Necesitamos su apoyo y el de los vecinos, y estamos trabajando en el libro de fiestas. Esta vez, en vez de textos como antes llevará reseñas de asociaciones y agrupaciones locales, para que se presenten y tengan visibilidad», cuenta Pena. Como agente ha retomado todas las fiestas que se habían suspendido en 2020, desde Santa Rosa, en O Barqueiro, a la Romaxe en San Adrián, A Xilde en San Claudio, San Antonio en Espasante o San Marcos en Senra (esta ya se celebró, el 25 de abril). Comenta que muchas orquestas «han cambiado, aunque conserven el nombre, porque tienen músicos nuevos». Muchos se vieron forzados a cambiar de sector para sobrevivir a los dramáticos efectos de la pandemia.

Pena augura «unas fiestas con mucha chavalería». «Los que tienen 17 o 18 años casi no han salido y están con unas ganas impresionantes», constata. De hecho, planea cerrar el pub que regenta en Ortigueira en los meses de verano, «porque todo el mundo querrá irse a las verbenas».

En las Festas de Agosto de Cedeira, del 11 al 17, ganarán protagonismo los grupos locales, en el escenario de la plaza Roxa y en el Festival Discalz@s (en la web del Concello, que organiza las patronales, se pueden inscribir). «Retomaremos a carreira popular, os fogos, o carnaval de verán, o pregón, actividades infantís... e case todas as atraccións», como avanza el alcalde, Pablo Moreda. Tanxugueiras pondrá el broche el 17.

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