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Unos apartamentos turísticos en Ribadeo que rinden homenaje al sacrificio y esfuerzo familiar

j.a. RIBADEO / LA VOZ

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Abre Villa Cordido, con el aliciente de poder mostrar a los visitantes el modo de vida rural y una moderna ganadería de ochenta vacas de leche

26 ene 2022 . Actualizado a las 13:13 h.

Ribadeo cuenta con una nueva empresa de alojamientos turísticos, Villa Cordido, en la parroquia de Vilaframil. Se trata de cuatro apartamentos turísticos promovidos por Jacobo Río García, un joven ribadense hijo de ganaderos en activo, que tienen una moderna granja en las proximidades con unas 80 vacas de leche. Además de los alicientes que presenta Vila Cordido por su nivel de confort, la tranquilidad del entorno, la proximidad de As Catedrais y todo tipo de servicios, precisamente la posibilidad de transmitir a los visitantes cómo es la vida rural y de incluso conocer la explotación ganadera es otro de los atractivos de este nuevo negocio que, además, tiene una interesante historia de trasfondo, en la razón de ser del nombre elegido, Villa Cordido.

La casa familiar y la ganadería se llama Cordido, porque es en esta parroquia de Foz donde tiene sus orígenes la familia, que en 1927 se asentó en Vilaframil (Ribadeo), adquiriendo una pequeña casa y un terreno. En ella siempre hubo algún tipo de negocio, de distribución de bebida, de piensos y ganadería. «Hemos decidido llamar a los apartamentos Villa Cordido, en homenaje al esfuerzo y sacrificio que nuestra familia ha realizado a lo largo de los años. Sin su trabajo este proyecto no sería posible», explica Jacobo Río. Han derrochado ilusión y esfuerzo con un propósito, dice, que los huéspedes se sientan como en casa, «y puedan conocer un poco de la vida ganadera, del pueblo de Vilaframil y de A Mariña».

Un negocio que nace con la expectativa de crecer en el futuro

Tres de los apartamentos son para 4 personas y uno para 6. Los precios por día son de 100 euros para los primeros y de 130 para el de 6 plazas. Todos ellos cuentan con cocina equipada con vitrocerámica, nevera, microondas y lavadora; salón con sofá y baño con ducha. Los cuatro apartamentos tienen dos habitaciones y en el caso del de seis plazas dispone de un altillo con dos camas más.

Villa Cordido está situada en una finca privada de 2.000 metros cuadrados con cámping privado. Explican, además, que «el acceso a cada apartamento se realiza a través de un código de seguridad. Diseñado con estilo, cuenta con todas las modernidades posibles incluso con enchufes USB por si te olvidas el cargador. Además, dispone de Internet fibra óptica y wifi en todo el apartamento. En la parte exterior dispone de muebles de terraza y toldo para cubrirla».

 En esta primera fase de han construido cuatro apartamentos, pero el proyecto es más ambicioso y de cara al futuro pretenden duplicarlos. El establecimiento es «pet-friendly», admite mascotas.